Domingo Moreno Jimenes, nacido el 7 de enero de 1894 en Santo Domingo, República Dominicana, fue un destacado poeta y educador, reconocido principalmente por ser el fundador del movimiento literario conocido como Postumismo.
Hijo de Domingo Moreno Arriaga y María Josefa Jimenes, su linaje incluía figuras prominentes, siendo nieto del expresidente Juan Isidro Jimenes.
Desde temprana edad, Moreno Jimenes mostró una inclinación hacia la poesía y la educación. Realizó sus estudios en la Escuela Primaria San Luis Gonzaga y se graduó como Maestro Normal de Segunda Enseñanza en la Escuela de Bachilleres de Santo Domingo, dirigida por Federico Henríquez y Carvajal.
Su carrera en el magisterio lo llevó a desempeñarse como director de la Escuela Primaria Graduada de Sabaneta en dos ocasiones (1918 y 1926) y como profesor en la Escuela Normal de San Pedro de Macorís.
En 1921, junto a Rafael Augusto Zorrilla, Andrés Avelino, Vigil Díaz y Francisco Ulises Domínguez, Moreno Jimenes anunció en la revista La Cuna de América el nacimiento del Postumismo, un movimiento poético que buscaba romper con las estructuras del Modernismo y promover una poesía más auténtica y nacionalista.
Este movimiento introdujo el verso libre en la poesía dominicana y enfatizó temas relacionados con la tierra y la cultura local, alejándose de las referencias mitológicas y aristocráticas del Modernismo.
Moreno Jimenes fue un poeta multifacético, considerado el primer poeta metafísico de la literatura dominicana. Su obra aborda temas profundos sobre la existencia humana, la muerte y la trascendencia, reflejando una constante búsqueda de lo absoluto y lo eterno.
Entre sus obras más destacadas se encuentran «Vuelo y duelos» (1916), «Psalmos» (1921), «Antología Mínima» (1943) y «Los milenios del Tercer Mundo» (1945).
A lo largo de su vida, Moreno Jimenes mantuvo un espíritu de combate, participando activamente en diversos movimientos literarios y dirigiendo revistas como «El Día Estético», que difundía las creaciones de los miembros del Postumismo.
Falleció en Santo Domingo el 23 de septiembre de 1986, dejando un legado invaluable en la literatura dominicana y siendo recordado como el «Misionero» de la poesía por su dedicación a la difusión y promoción del arte poético en su país.